Saturday, December 24, 2016

Salmo 1

Salmo 1
Canto basado en el Salmo 1: Dicha Grande Es La Del Hombre, #141 Himnario Bautista

V.1  Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos, ni estuvo en camino de pecadores, ni en silla de escarnecedores se ha sentado;
V.2  Sino que en la ley de Jehová está su delicia, y en su ley medita de día y de noche.
V.3  Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas, que da su fruto en su tiempo, y su hoja no cae; y todo lo que hace, prosperará.
V.4  No así los malos, que son como el tamo que arrebata el viento.
V.5  Por tanto, no se levantarán los malos en el juicio, ni los pecadores en la congregación de los justos.
V.6  Porque Jehová conoce el camino de los justos; mas la senda de los malos perecerá. 

V.1
Bienaventurado
¡Qué lindo comienza el libro de Salmos! Es la misma forma en que Jesús comenzó su sermón en el monte. Simplemente, bienaventurado significa ‘tres veces feliz’.
Múltiples bendiciones, abundancia de bendiciones. Es la promesa dada a aquellos que leen y meditan en la Palabra de Dios.

El varón
Donde dice varón entramos todos porque la Palabra de Dios es para todos. El varón simplemente es la cabeza del hogar.
Ejemplos:
Josué: Pero yo y mi casa…
El carcelero: Serás salvo tú y tu casa…
Que no anduvo en consejo de malos
Igual que la fe viene por el oír, el pecado puede entrar en nuestras vidas por el oír. Hoy día los cristianos, en esta sociedad, tenemos la boca sellada por las leyes y regulaciones. Se nos prohíbe hablar de Dios pero no se prohíbe hablar de cosas que no convienen. En los centros de trabajo algunas veces no nos queda más remedio que escuchar tonterías por horas. Pero debemos tener cuidado cuánto de lo que escuchamos se nos ‘pega’.
Ni estuvo en camino de pecadores
Una cosa es oír lo que dicen los malos consejeros, otra es caminar con los pecadores. Donde antes estaba simplemente escuchando, ahora estoy participando.
Ni en silla de escarnecedores se ha sentado
Escarnecedor: Burlador; aquel que se burla de las cosas de Dios. Se usa la palabra para describir algunas de las muchas cosas que le hicieron a Jesús cuando fue arrestado. Cuando caminamos con las personas que no convienen, seguimos consejo equivocado, y participaremos en cosas que nos pueden hacer mucho daño.
Ejemplo: Lot
Se apartó de Abraham y escogió tu terreno. Se acercó a Sodoma y Gomorra, puso sus tiendas cerca, mirando hacia la ciudad (Gen. 13-14). Cuando la historia regresa a Lot (Gen. 18), lo encontramos muy acomodado entre los ciudadanos de Sodoma, sentado a la puerta de la ciudad, haciéndose el ciego a los horrores que se cometían allí.

V.2
En la ley de Jehová está su delicia
Está de moda ahora decir que tenemos muchas opciones. Algunos se atreven a decir que hay muchos caminos al cielo. Pero la Biblia enseña que hay solamente dos opciones, dos caminos. Jesús habló de la puerta ancha y la puerta estrecha. El Salmo 1 presenta el camino de los pecadores y el camino de Dios.
Y en su ley medita de día y de noche.
Debemos ser dirigidos por la Palabra de Dios. Israel era un pueblo único: Estaban rodeados de naciones paganas y no debían contaminarse con ellas. Igual vivimos los cristianos. Estamos en el mundo, pero no somos del mundo (Juan 17:11-17). Estamos conscientes de que amistad con el mundo es enemistad contra Dios (Santiago 4:4). Sabemos que el mundo nos puede manchar (Santiago 1:27). Debemos evitar ser condenados con el mundo (I Corintios 11:32)
Meditar: (H1897 הָגָה   hâgâh) reflexionar, murmurar, cavilar, gemir, hacer un sonido quedo como el de un suspiro
Mucho más que un ejercicio mental, meditar significa contemplar algo mientras se repiten palabras. Incluye movimiento físico. Si has visto un judío leyendo las Escrituras, sabes lo que es meditar: murmura al leer, lee en voz baja, no en silencio.
Porque la Palabra de Dios debe estar en la boca (Josué 1:8)
Es una forma de leer abandonando toda distracción. De esta tradición viene el tipo especializado de oración judía en la cual: Se recitan textos, se ora intensamente; la persona está en comunión con Dios mientras hace una reverencia o se balancea hacia delante y hacia atrás. La idea es que “Si hablamos con Dios de su Palabra, su Palabra nos hablará a nosotros de Dios.”

V.3
El árbol en la Biblia es una imagen familiar. A veces representa al pueblo de Israel (Ezequiel 17); a veces representa a una persona (Daniel 4).
Jeremías 17:7–8  Bendito el varón que confía en Jehová, y cuya confianza es Jehová. Porque será como el árbol plantado junto a las aguas, que junto a la corriente echará sus raíces, y no verá cuando viene el calor, sino que su hoja estará verde; y en el año de sequía no se fatigará, ni dejará de dar fruto.
Mateo 7:16   Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos, o higos de los abrojos?

En la Biblia, agua (para beber) muchas veces representa el Espíritu Santo.
Juan 7:37–39  En el último y gran día de la fiesta, Jesús se puso en pie y alzó la voz, diciendo: Si alguno tiene sed, venga a mí y beba. El que cree en mí, como dice la Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva. Esto dijo del Espíritu que habían de recibir los que creyesen en él; pues aún no había venido el Espíritu Santo, porque Jesús no había sido aún glorificado.

Agua para lavar muchas veces representa la Palabra de Dios.
Efesios 5:26   Para santificarla, habiéndola purificado en el lavamiento del agua por la palabra.

La sed representa la sed de Dios:
Mateo 5:6   Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados.
Apocalipsis 22:17  Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente.

Y el rio representa la provisión de Dios, la bendición espiritual, y la ayuda a su pueblo (Ezequiel 47; Números 20; Apocalipsis 22—rio de agua de vida).

El hombre de Dios que se mantiene fiel y se alimenta de la Palabra de Dios es como ese árbol fuerte: Es bendecido y es bendición.

Todo lo que hace prosperará
La persona que cumple con los requisitos de Dios será bendecida grandemente. Tres veces feliz; bendición múltiple. Y también será de bendición a los demás.
Génesis 12:2  Y haré de ti una nación grande, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre, y serás bendición.
Esa fue la promesa de Dios a Abraham. Y es la misma promesa de Dios para el pueblo de Israel y para nosotros. Si cumplimos con Su requisito de deleitarnos en Su Ley, Su Palabra, y meditar en ella día y noche.

Los versículos 1 al 3 dan una primera, breve y muy simple imagen de Cristo:
V.1 = El camino
V.2 = La ley = la verdad
V.3 = La vida

V.4-6
No así los malos, que son como el tamo que arrebata el viento. Por tanto, no se levantarán los malos en el juicio, ni los pecadores en la congregación de los justos. Porque Jehová conoce el camino de los justos; mas la senda de los malos perecerá. 

Tamo: La cápsula que envuelve el grano. No pesa suficiente cuando está vacía y por eso no puede resistir el viento que la arrastra. Mientras que el cristiano es un árbol fuerte con buenas raíces, el incrédulo es un tamo, una paja que se lleva el viento y que está destinada al fuego.
Juan el Bautista usó estas mismas imágenes—el árbol, el fruto, la paja—para avisar a los pecadores que debían arrepentirse (Mateo 3:7–12).

El salmo termina con:
Porque Jehová conoce el camino de los justos; mas la senda de los malos perecerá. 

No es un conocimiento intelectual. Es conocimiento en el mismo sentido de: Y José conoció a María…. Es la relación íntima que debe existir entre el hombre y Dios.
Jesús dijo (Mateo 7:21–23): No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos. Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad.

Y así mismo termina el primer Salmo: Jehová conoce al justo, mas la senda de los malos perecerá.


Tuesday, December 20, 2016

Cómo Surgió Este Estudio de los Salmos

En Enero del 2010 mi pastor, Rev. Carlos Goyanes, me convenció de preparar un estudio del libro de los Salmos. Estabamos finalizando el estudio de la Epístola a los Romanos y teníamos que decidir cuál libro estudiaríamos. Romanos había ocupado casi 2 años de estudio y mi pastor me sugirió que escogiera entre Isaías y Salmos. Lo pensé por unos días. Consideré que la mayoría de mis alumnos en la Escuela Dominical son creyentes adultos, algunos son personas que llevan más tiempo en la fe que mi edad. Isaías es un libro bello, pero un estudio a fondo me daba miedo. En aquel tiempo yo consideraba los Salmos un libro aburrido y algo incoherente, y además demasiado largo. Si los 16 capítulos de Romanos me llevaron casi 2 años, ¿cuánto tiempo me tomaría presentar un estudio de los Salmos con sus 150 capítulos? Me sentí entre la espada y la pared pero le dije al pastor que prefería Isaías. Inmediatamente me dijo que los Salmos sería mejor.

Después de pensarlo y debatirlo con el pastor por varias semanas, decidimos estudiar los Salmos. El preparó la introducción y yo comencé a orar, leer, orar, leer, orar, leer. Mientras más leía, más me gustaba el libro. Mientras más oraba, más me convencía que era necesario para nuestra iglesia estudiar el libro de los Salmos, y necesario para mí. Ví desde el comienzo que me esperaban cambios personales y cambios en la iglesia. Me dí cuenta que tendría que enfrentar algunos prejuicios, ideas preconcebidas y firmemente arraigadas por los años y las costumbres. Le pedí al Señor que me acompañara porque sin El no podría hacerlo.

Decidimos, planeamos, pensamos. Creíamos que 3 años, quizás un poco más sería adecuado para el estudio de los Salmos. Un capítulo cada domingo, quizás 2 domingos para los salmos más largos. Definitivamente el 119 requeriría varios domingos. Pensé que harían falta 10-12 lecciones para el Salmo 119, el capítulo más largo de la Biblia. Al final de Febrero, el pastor presentó una introducción y ya el primer domingo de Marzo ese año comencé el estudio con el Salmo 1.

Tiempo después de comenzar, un amigo que no había estado presente para las primeras lecciones, me pidió que le mandara las notas por email. Tuve que re-crear la introducción del pastor y se las envié. Al leerlas, me sugirió que las pusiera en un blog para que así los alumnos que quisieran tener las notas podrían tenerlas sin yo tener que enviarlas individualmente a nadie. Me pareció buena idea, y comencé por poner la introducción en este blog. Pero hasta ahí llegué.

Seis años más tarde, aquí estoy, todavía a la mitad del libro de los Salmos, todavía aprendiendo y enseñando. He aprendido que mi pastor es mi mejor alumno y mi mejor crítico. Me hace repetir salmos, con otro enfoque, para presentar todos los matices posibles. Me dice que no crea que nadie va a presentar ese salmo de nuevo con otro enfoque, tengo que mirarlo de todos los ángulos y enseñarlos así. El Salmo 23, por ejemplo, fue presentado de por lo menos 4 formas—mirando al pastor, mirando a las ovejas, estudiando los nombres de Dios, mirando a Jesús.... Bueno, ya llegaremos a eso.

Actualmente, Diciembre 2016, acabé de presentar el Salmo 88 justo a tiempo para la Navidad. Después de un breve descanso, continuaré las lecciones. Creo que a este paso me faltan otros 5-8 años. Mucho depende de mis alumnos, cuánta participación tengan en la clase. Algunas veces escuchan atentamente con alguna que otra pregunta o comentario. Otras veces me interrumpen con entusiasmo para opinar sobre algo, para obligarme a preparar más detalles sobre algún punto y retomarlo en la próxima clase. El Salmo 88, por ejemplo, con su tema tan sobrio, yo calculé que podría enseñarlo en 2 clases. Casi siempre estoy preparada para presentar hasta 10 versículos en una lección, casi nunca paso de 6. En el Salmo 88 estuve anclada en la introducción 2 domingos. No me dejaban progresar al primer versículo. (El resto del Salmo 88 me tomó 4 clases.) El ánimo y deseo de aprender de mis alumnos me anima a seguir estudiando y preparándome.

Mi pastor me ayuda con los temas más difíciles, pero generalmente estoy por mi cuenta, Gracias al Internet, tengo acceso a muchos recursos de estudio, comentarios y diccionarios bíblicos que son la base más importante para cualquier maestro de Escuela Dominical. De valor incalculable son los escritos de Charles H. Spurgeon (Treasury of David) y eSword.

Poco a poco, iré poniendo los estudios de los Salmos, con poca desviación de lo que presenté en clase.

Thursday, August 18, 2011

Introducción al Libro de los Salmos

INTRODUCCIÓN A LOS SALMOS

Etimología — origen, raíz
• Salmo viene del Griego ψαλμοί (psalmoi)
• Significado original: canciones cantadas con arpa
• De “Psallein”: tocar en instrumento de cuerdas

Composición y Numeración
150 salmos, cantos
Algunos de los salmos son extremadamente largos (119). Es posible que sea una compilación de varios salmos relacionados.

Cuando la Biblia fue dividida en capítulos y versículos, cada Salmo fue asignado un número, o capítulo. Esos números fueron añadidos al texto por lo menos 1,500 años después de su compilación.
Aunque algunos comentaristas piensan que es imposible determinar las tonadas de los salmos, muchos de los salmos contienen en sus títulos anotaciones que indican el instrumento, ritmo, o posiblemente el nombre de la tonada que el autor deseaba usar con su canto. Hay otros comentaristas que opinan que los judíos tenían un sistema primitivo de anotación musical que les guiaba en el canto de los salmos.
Numeración
La organización y numeración de los Salmos difiere entre los manuscritos hebreo (Masorético) y griego (Septuaginta).
Los Salmos 9 y 10 en el hebreo forman el Salmo 9 en el griego.
Los Salmos 114 y 115 en el hebreo forman el Salmo 113 en el griego.
El Salmo 116 en el hebreo está separado en dos partes, Salmos 114 y 115, en el griego.
El Salmo 147 en el hebreo está separado en dos partes, Salmos 146 y 147, en el griego.
Las Biblias usadas por las iglesias ortodoxas están basadas en el sistema de numeración griego. Las traducciones de las iglesias protestantes están basadas en el sistema de numeración hebreo. Los textos oficiales de la Iglesia Católica siguen el sistema griego, pero algunas traducciones católicas modernas usan el sistema hebreo y a veces añaden en paréntesis el número griego.
En el resto de nuestro estudio usaremos la numeración hebrea, tal como aparece en la Reina Valera 1960.

Construcción de los Salmos
Trasfondo
El libro de los Salmos es una de las colecciones más grandes de cantos, oraciones y poesías de la antigüedad. Los Salmos expresan pasiones profundas, clamores de desesperación, y también expresan alabanzas al Dios Creador y Proveedor. En ellos podemos escuchar al salmista derramar su dolor y también su gozo. Los Salmos nos llevan por los valles y por las montañas de la experiencia humana, y finalmente nos guían a alabar a nuestro amante Creador.
Autores
Muchos de los Salmos no tienen el nombre del autor, pero un gran número de ellos tiene el nombre de David, rey de Israel, en la introducción. David es conocido como el “dulce salmista de Israel”. Aunque esas notas de introducción probablemente no eran parte original de cada salmo, fueron añadidas por editores hace muchos siglos y no tenemos motivos para descontarlas.
Los libros históricos hablan de David y sus talentos como cantante, compositor, y constructor de instrumentos musicales. Uno de los Salmos de David aparece en 2 Samuel 22 y, con pequeñas variaciones, en el Salmo 18. Partes de una composición que David presentó a Asaf en 1 Crónicas 16:8-36 son tomadas de los Salmos 105, 96 y 106.
No sabemos quién escribió el Salmo 119, el más largo de todos. Este Salmo es conocido como el “Salmo Torah” porque habla sobre la ley.
Se piensa que los demás Salmos, en su mayoría, fueron escritos por contemporáneos de David, personas que él había puesto para dirigir la adoración en Jerusalén.
Salomón, siguiendo el ejemplo de su padre, escribió varios Salmos además de proverbios. Algunos de los Salmos más antiguos fueron escritos por Moisés, cinco siglos antes de David.
Muchos otros contribuyeron a la escritura de los Salmos, incluyendo miembros de la familia de Coré, sacerdote. Se piensa que Débora y Ana posiblemente hayan escrito Salmos.
Compilación del Libro de los Salmos
Durante el tiempo de Esdras, todavía se estaban componiendo los Salmos. Pero fue en ese tiempo que el libro de los Salmos tomó la forma que conocemos hoy.

Estructura del Libro
Cinco Libros
Libro 1: Salmos 1–41
Libro 2: Salmos 42–72
Libro 3: Salmos 73–89
Libro 4: Salmos 90–106
Libro 5: Salmos 107–150

Cada libro concluye con una doxología, o alabanza, a Dios. El Salmo 150 sirve como doxología para el Libro de Salmos entero.

No se sabe quien organizó los Salmos en el orden presente. Tampoco se sabe por qué fueron puestos en ese orden en particular. Algunos piensan que el orden tiene que ver con el uso de los Salmos en el culto de adoración en el templo. Personalmente, estoy convencida que la mano de Dios guió el orden y que cada Salmo añade al anterior de alguna forma. Veremos en nuestro estudio cómo podemos entender mejor el Salmo 30 si ya hemos estudiado los 29 Salmos anteriores.
Los Libros 1 y 2 contienen en su mayoría Salmos de David. El Libro 3 incluye Salmos de Asaf y los hijos de Coré. Los Libros 4 y 5 tienen Salmos anónimos y Salmos de David y otros autores.

Categorías de los Salmos
Podemos clasificar los Salmos en varias categorías según sus temas. Por ejemplo, Salmos ‘Reales’ hablan de Dios el Rey y usan frases como “Jehová reina.” Estos Salmos hablan de Dios como Creador, Salvador de Israel, y ‘el que ha de venir.’
Los Salmos de ‘Sion’ se enfocan en Jerusalén, usando el nombre Sion. Hablan de la ciudad escogida por Dios para hogar del Templo, el lugar de adoración.
Los Salmos ‘Penitenciales’ son aquellos donde el salmista confiesa sus pecados al Señor, pide perdón, y alaba a Dios por su relación renovada por el perdón. Ejemplo clásico es el Salmo 51.
Los Salmos ‘Sabiduría’ enfocan en algunos de los mismos temas que encontramos en el libro de Proverbios. Presentan un marcado contraste entre el justo y el malo. Hablan de las bendiciones de Dios, y también las maldiciones, y tienen un enfoque en la vida justa.
Una sub-categoría de estos Salmos son los Salmos ‘Torah,’ poemas que enfocan en la belleza, verdad, y suficiencia de la ley de Jehová.
Algunos de los Salmos que más nos inquietan son aquellos que contienen oraciones que aparentemente piden a Dios que maldiga al malo. Se les llama Salmos ‘Imprecatorios.’ Estos Salmos se consideran a veces estar en conflicto con los sentimientos de los Evangelios, sin embargo reflejan el disgusto que siente Dios por el mal. Veremos en nuestros estudios que, particularmente en los Salmos de David, el salmista no pide una maldición tanto como justicia. No pide venganza tanto como ser librado del maligno. No pide la muerte del malo sino que el malo caiga en su propia trampa o sea detenido.
Los Salmos de la ‘Pascua,’ Salmos 113-118, tienen tono gozoso y profético. Estos Salmos, por tradición, se cantaban al comienzo de la celebración de la Pascua y se les llamaba ‘Halal Egipcio.’ Los Salmos 113-115 se cantaban en el Templo, durante el sacrificio de los animales. Los Salmos 116-117 se cantaban durante la cena, y al final se cantaba el Salmo 118.
Otro grupo de Salmos, agrupados al final del libro, también se llaman Salmos ‘Halal.’ Estos enfocan en el éxodo de Egipto y alaban a Dios por Su carácter y por Su salvación.
La última categoría de Salmos es el ‘Lamento,’ y el contenido es evidente.
Estructura del Lamento
La última categoría mencionada fue el ‘Lamento.’ En esos Salmos podemos sentir las fuertes emociones del salmista. Son palabras escritas por gente que vivieron situaciones difíciles. Son personas que saben que Dios no les castigará por sus palabras honestas; aunque le griten a Dios, es un grito de fe.
Introducción:
“Oh Dios”
“Ayúdame”
Lamento:
“Estoy sufriendo”
“El enemigo está ganando”
Estas palabras introducen el dolor que el salmista está experimentando. Se dirige directamente a Dios y tiene un tono ligeramente acusatorio, quizás por no prestar atención al dilema del autor. El salmista señala el éxito del malo.
Confesión de confianza:
“En ti confiaré”
Razones para que Dios actúe:
“He sido justo”
Peticiones:
“Escúchame”
“Sálvame”
Promesas de alabanza:
En la tercera parte del lamento, el malo presenta dos problemas intolerables para el salmista. Primero, ha hecho un ataque personal al individuo que es ‘amigo de Dios.’ Segundo, ese ataque tiene significado para Dios. Es decir, el ataque pudiera considerarse como un ataque a Dios mismo, por medio de su agente el justo. Por tanto, si estas condiciones se permiten, aparecerán como una debilidad por parte de Dios, o un deterioro en Su habilidad y poder para proteger al justo y la comunidad de creyentes.
Los Lamentos son un modelo de la respuesta de Dios al sufrimiento. Dios no espera que nos mantengamos imperturbables o indiferentes ante el sufrimiento. Podemos derramar lágrimas ante Él, pero no debemos olvidar que Dios nos ama y nos cuida. Recordando Su cuidado en el pasado — nos libró del cautiverio, perdonó nuestros pecados, nos trajo a Su Iglesia, nos dio vida eterna — podemos confiar en Él para el futuro.
El Salmo 71 es un ejemplo del Lamento. Enfocándose en la confianza en Dios, el Salmo alterna entre expresiones de desesperación y confianza en Dios.


Características de los Salmos
Para apreciar los Salmos, debemos tener en cuenta algunas de sus características.
• Se escribieron con la intensión de ser cantados en público, durante la adoración en el Templo en Israel, y en nuestros templos hoy. No son meramente poemas. Contienen convenciones peculiares de la música y adoración durante el Israel antiguo.
• Fueron escritos durante un período de 1000 años, desde Moisés hasta Esdras.
• Fueron colectados y arreglados durante largo tiempo.
• Fueron escritos en el lenguaje del espíritu humano y reflejan los sentimientos del autor durante una crisis o evento específico. Son palabras del alma. No son palabras refinadas y rebuscadas sino obras llenas de emociones y palabras desgarradoras. Contienen exageraciones dramáticas y lenguaje figurado.
• Formaron parte de la vida ordinaria de los Israelitas. Las Escrituras marcan múltiples ocasiones en que el pueblo de Israel respondió a Dios espontáneamente con un Salmo de adoración.
• Individualmente, cada Salmo fue escrito con un propósito diferente. Algunos comenzaron como expresión privada de devoción, mientras que otros fueron diseñados específicamente para la adoración pública. Al final, todos se convirtieron en el tesoro de todo el pueblo.
• No importa el tema, todos los Salmos guían al lector, o cantor, a adorar al Dios Vivo.
• Fueron escritos en forma de respuesta. En forma poética, los Salmos graban la poderosa respuesta de un individuo a su Dios. Desde el clamor desesperado hasta el grito gozoso, cada Salmo es una respuesta a Dios en medio de una situación particular.
• Por último, no conocemos las circunstancias en que cada Salmo fue escrito y en muchos casos, nunca las sabremos. Por ejemplo, el Salmo 22 describe claramente la crucifixión de Jesús — algo que no existía en ninguna parte del mundo cuando David lo escribió, y que David jamás experimentó en carne propia. En ese caso, y en algunos otros, debemos concluir que únicamente el Espíritu Santo pudo dar esas palabras al salmista.